Modelo colectivo, también llamado modelo unificado, descripción de los núcleos atómicos que incorpora aspectos del modelo nuclear de cáscara y del modelo de gota líquida para explicar ciertas propiedades magnéticas y eléctricas que ninguno de los dos por separado puede explicar.
En el modelo de cáscara, los niveles de energía nuclear se calculan sobre la base de un solo nucleón (protón o neutrón) que se mueve en un campo potencial producido por todos los demás nucleones. La estructura y el comportamiento nucleares se explican entonces considerando los nucleones individuales más allá de un núcleo nuclear pasivo compuesto por protones emparejados y neutrones emparejados que llenan grupos de niveles de energía, o cáscaras. En el modelo de gota líquida, la estructura y el comportamiento nucleares se explican a partir de las contribuciones estadísticas de todos los nucleones (del mismo modo que las moléculas de una gota esférica de agua contribuyen a la energía global y a la tensión superficial). En el modelo colectivo, los estados de alta energía del núcleo y ciertas propiedades magnéticas y eléctricas se explican por el movimiento de los nucleones fuera de las envolturas cerradas (niveles de energía completos) combinado con el movimiento de los nucleones emparejados en el núcleo. A grandes rasgos, el núcleo nuclear puede considerarse como una gota líquida en cuya superficie circula una protuberancia de marea estable dirigida hacia los nucleones no apareados que giran fuera de la protuberancia. La marea de protones cargados positivamente constituye una corriente que a su vez contribuye a las propiedades magnéticas del núcleo. El aumento de la deformación nuclear que se produce con el aumento del número de nucleones no apareados explica el momento cuadrupolar eléctrico medido, que puede considerarse una medida de cuánto se aparta la distribución de la carga eléctrica en el núcleo de la simetría esférica.